Para entender en pocas líneas lo que pasa en Palestina

Por Mariano Saravia-Lo primero que tenemos que entender es que no es una guerra, ni un conflicto entre iguales, porque estamos hablando de un Estado como Israel, con uno de los ejércitos más poderosos del mundo, y un pueblo como el palestino, que no tiene Estado y por consiguiente no tiene ejército. Aquí no hay ningún lugar a una teoría de los dos demonios. -La mayor prueba de la desproporción es el dramático recuento de muertos de uno y otro lado. En una semana de violencia generalizada, ya se cuentan 103 palestinos muertos, 27 de ellos niños, y 8 israelíes. En el último ataque a gran escala de Israel contra palestinos, en 2014, fueron 2251 palestinos, la mayoría civiles, y 73 israelíes, casi todos soldados. -¿Pero por qué está pasando lo que vemos? Esta es una semana cargada de tensiones previas, empezó el lunes 10 con el llamado “Día de Jerusalén”, en el que los israelíes celebran la invasión y conquista de Jerusalén Este en la Guerra de los Seis Días de 1967. Hasta ese momento, Jerusalén era una ciudad dividida, el oeste para Israel y el este bajo mandato de Jordania. A partir de ese 10 de mayo de 1967, Israel ocupó la totalidad de la ciudad y la considera su única e indivisible capital. Esto va en contra de todas las resoluciones de la ONU que dicen que Jerusalén Este debería ser la capital de un futuro Estado Palestino. En los últimos tiempos, el Imperio Estadounidense y algunos países vasallos han trasladado sus embajadas de Tel Aviv a Jerusalén, avalando la posición israelí. -Esta semana llena de tensiones terminará este viernes 14 con el 73° aniversario de la creación del Estado de Israel, motivo de festejo para los israelíes. Pero el sábado 15 los palestinos conmemoran la Nakba, que significa “la gran catástrofe” porque significó una limpieza étnica y la expulsión de miles de ellos de sus tierras para que naciera el Estado de Israel. Hoy se calcula que hay unos siete millones de refugiados palestinos de tercera generación, en Cisjordania y en otros países. Muchos de ellos conservan las llaves de las casas que tuvieron que abandonar sus abuelos.-En ese contexto, los disturbios comenzaron el viernes pasado, día sagrado para los musulmanes. Ese día, cientos de palestinos fueron desalojados por la fuerza por la Policía Israelí de la Mezquita Al Aqsa, en la Explanada de las Mezquitas, el tercer lugar sagrado del Islam. También ese fin de semana se impidió a los palestinos estar cerca de la Puerta de Damasco, en pleno sector árabe, Jerusalén Este y en pleno fin del Ramadán (mes del ayuno). El motivo fue hacer lugar para el paso de una marcha de judíos ultraortodoxos y de extrema derecha, una verdadera provocación. -El domingo estallaron más disturbios en el barrio de Sheij Yarrah, donde la Policía intentó desalojar a palestinos para que sus casas fueran ocupadas por colonos israelíes. Esto en base a una ley israelí muy cuestionada internacionalmente que permite a judíos reclamar propiedades en Jerusalén Oriental de antes de 1948 pero no permite a palestinos reclamar lo mismo en Jerusalén Occidental. Esto es parte de la política de colonias que lleva adelante el Estado de Israel, invadiendo y ocupando cada vez más y más territorio palestino, no sólo en Jerusalén Este, sino en toda Cisjordania. -Ante esta situación, desde el lunes se produce una reacción de los palestinos con disturbios en ciudades como Lod, Acre, Haifa y Nazaret, entre otras tantas dentro del Estado de Israel pero con una considerable población árabe. Pero esa reacción también vino desde Gaza con una lluvia de cohetes hacia ciudades israelíes. -¿Por qué esto se da desde Gaza? Porque es el único territorio que no está ocupado por Israel, y por consiguiente tienen la posibilidad de tener armas, cosa imposible entre los palestinos de Israel o Cisjordania. En Gaza gobierna Hamas y construye sus propios misiles. En general son armas caseras, artesanales, porque el bloqueo total de Gaza impide que se importe nada, no sólo armas sino tampoco alimentos ni medicamentos. Pero en los últimos años han mejorado su tecnología y en esta semana sorprendió la cantidad de misiles y el alcance de los mismos, llegando a Tel Aviv y Jerusalén.-De todos modos, la desproporción bélica es infinita. El escudo “Domo de Hierro” de Israel hace que la mayoría de esos misiles exploten en el aire y se neutralicen. Pero algunos de ellos sortean las barreras israelíes y llegan a las ciudades.-Ante esta situación, Israel lanzó más de 600 bombardeos masivos contra Gaza, generando una gran destrucción material y la cantidad de muertos mencionada, aunque seguramente esa cantidad va a aumentar. En estos momentos, Israel prepara 10 mil soldados para una invasión terrestre, que podría significar una carnicería en la Franja de Gaza. -Mientras tanto, los palestinos están levantados en un grito de rebeldía contra el gobierno de extrema derecha de Benjamín Netanyahu.-Hay entonces tres frentes de conflicto: una es Gaza, que tiene capacidad para seguir lanzando cohetes e Israel que sigue masacrando palestinos y prepara una invasión terrestre. Otro frente son las ciudades de Israel donde hay población palestina y están levantados en insurrección, como Nazaret, Haifa, Acre o Yafo. Y el tercer frente es el de los palestinos en Cisjordania, contra la ocupación ilegal de los colonos civiles y del Ejército israelí. Ojo, podría sumarse un cuarto frente si Hezbollah, que domina el sur de El Líbano, decide solidarizarse con el pueblo palestino y atacar el norte de Israel. -¿Cuál es la solución a esta situación? Que Israel empiece a cumplir la ley internacional y cumpla tres exigencias básicas de la comunidad internacional: primero volver a las fronteras del ’67, esto es dejar su política de ocupación con colonias y abandonar el muro de la vergüenza que sigue construyendo; segundo respetar la división de Jerusalén en dos, para que el Este de la ciudad sea la capital de un futuro Estado Palestino; y tercero permitir el regreso de los refugiados que fueron expulsados hace exactamente 73 años.

Israel es un Estado, hoy cumple 73 años. Tiene las armas más letales y la tecnología bélica y de espionaje más moderna. Incluso es un hecho que tiene armas atómicas, algo nunca desmentido por el propio Estado. En cambio, no deja que se constituya un Estado Palestino, algo previsto y defendido por la ONU. La ocupación de Cisjordania, la invasión de Jerusalén Este y el incumplimiento de las resoluciones de la ONU que lo instan a volver a sus frontera del ’67, en la práctica es la negación de existir al Estado Palestino.Eso en la práctica, entre otras muchas cosas, significa que los palestinos no pueden defenderse porque no tienen un ejército regular. Esto lo debería entender mejor que nadie en el mundo el pueblo de Israel, que sufrió persecuciones por miles de años justamente por no tener un Estado donde protegerse. Hoy, no tener un Estado significa que a los palestinos les quedan dos opciones: – En Cisjordania enfrentarse a su poderoso invasor con hondas y piedras tipo Intifada. -En Gaza enfrentarlo con guerra de guerrillas y cohetes de fabricación local, por el bloqueo absoluto, como hace Hamas. Después, es fácil y muy cínico que la mayoría de los periodistas tergiversen y hablen de «terrorismo» palestino.Pero el mayor acto de terrorismo es que Israel, con la complicidad de Occidente, niegue a Palestina ser un Estado y poder defenderse. Los resultados están a la vista. Basta de mentir.Basta de ir a las consecuencias. Vayamos a las causas